sábado, 13 de diciembre de 2008

Nota de pié

Pobre y engañoso argumento aquel del neoconceptualista que pretende que la actividad artística ya no consiste en crear imágenes, porque existen ya demasiadas.
- Ya se ha hecho todo en pintura, debemos reflexionar sobre el quehacer artístico - se dice el que busca también que no se escriban más libros, ya que todas las letras han sido impresas y con ellas todos los paisajes descritos.
- Hoy los artistas pensamos más que los de la modernidad - rebuzna el aprendiz contemporaneo golpeando vivamente a la puerta de las mafias filosóficas, rogando por que lo dejen entrar.
Más allá del portón, ¿Cómo persuadir a estas personas que carecen de imaginación visual para que dejen a un lado aquellas grotescas formas de hacer teoría sobre arte?
A los disidentes nos rescatará el pensamiento visual ligado al trabajo creativo como necesidad humana, pues es a partir de allí que todo esfuerzo teórico encuentra su sentido e interés.